Problemas de seguridad en la piscina

El máximo directivo de la Liga de Bogotá ratificó que el torneo tuvo serias dificultades desde la misma sede inicial del Torneo Nacional Interligas.
“Desafortunadamente el campeonato ha presentado una serie de complicaciones que han dado al traste con un buen desarrollo del evento. El Huila asumió una responsabilidad que no le correspondía en últimas instancias, porque era un torneo que se iba a realizar en la ciudad de Medellín y presentó varios cambios de sede. Desafortunadamente para nosotros, la Federación no le dio la importancia que tenía este evento. Ésta pensó que era un evento cualquiera, como todos los que hace, y no había compromiso ni responsabilidad por parte de la Federación desde este punto de vista. Los que se ven perjudicados aquí siempre son los deportistas, este evento estaba programado para ser clasificatorio al Mundial de Palma de Mallorca, pero no ha cumplido con los requisitos mínimos que debe tener un torneo clasificatorio a un Mundial”, señaló Pérez.
Problemas con el tablero
Los deportistas a su vez señalaron que en las competencias tuvieron serias dificultades con el tablero electrónico al no indicar en tiempo real los registros de cada uno de los deportistas en las distintas pruebas.
“El tablero apenas funcionó en la tarde del sábado, pero hay mucha diferencia entre el cronometraje manual y el electrónico, una diferencia abismal; pero eso parte de la organización porque son problemas técnicos, por lo que creo que hace falta capacitación porque se tienen los elementos como las placas, que son excelentes”, afirmó Diego Rodríguez.
El tablero electrónico fue adquirido para el Campeonato Mundial Juvenil de Natación con aletas en 2008 realizado en las piscinas de la Villa Olímpica de Neiva, pero una vez terminó el evento, no pudo ser utilizado nuevamente para lo que realmente fue comprado: registrar los tiempos de los deportistas al tocar las placas en tiempo real. En la actualidad está subutilizado y solo se puede visualizar la hora y los logos de la Administración Local.
LA NACIÓN intentó dialogar con el administrador de las piscinas olímpicas, quien adujo no estar autorizado a dar ninguna información señalando que los únicos responsables eran el alcalde de Neiva, Héctor Aníbal Ramírez, y el director del Inderneiva, Héctor Julio Vargas. LA NACIÓN insistió en buscar una respuesta con este último funcionario pero no fue posible.